viernes, febrero 25

Ale-Alejandro (8)

A tu lado, he levantado el vuelo y he vuelto a soñar, aunque pareciera imposible. Me he dado cuenta de que entre tus brazos la vida no es tan terrible como parecía ser. He comprendido que me gusta coger tu mano cuando voy caminando por la calle y sentir como tu vida y la mía se mezclan en una sola y ya no se quieren soltar. Junto a ti los días parecen más bonitos y en el mundo se respira mejor. Junto a ti no tengo miedo, porque sé que tú no dejarás que me hunda y porque sé que tú me quieres. Y yo te quiero a ti, te quiero tanto que aquí estoy, perdida entre las teclas de un absurdo teclado que no me hace caso y se empeña en juntar las palabras tan, tan juntas como juntos estamos tú y yo. Si tú me acompañas una tarde entera tirada en la cama hablando tiene sentido y las horas vuelan, veloces como rayos. Si me abrazas fuerte podría despegar el vuelo y llevarte de viaje por las nubes pero no lo voy a hacer. Voy a quedarme por aquí contigo y vamos a recorrer nuestra ciudad y a descubrir cada rincón oculto de ella. Vamos a jugar a que nunca antes paseamos por estas calles y que, juntos, tenemos que redibujarlo todo. Cuando no nos quede un sólo rincón buscaremos otras ciudades, con otros bares, otros museos, otra gente y otros ruidos, puede que incluso tengan mares y que allí encontremos nuestro hogar y formemos una familia pero, mientras tanto, no me preocupo, soy nómada y mi hogar eres tú.

viernes, febrero 18

- ¿Lo ves? Es por eso... Porque me gusta que me interrumpas, que es... siempre, por cierto. Te quiero porque no pides perdón por ser tal y como eres, preciosa, lista, sexy como nadie.
- Vas a sonrojarme.
- Otra razón, no sabes como influyes en mí y tampoco sabes que te ríes como una niña pequeña.

lunes, febrero 14

Pide un deseo.

Si pudiera pedir un deseo ahora mismo acabaría metida entre tus sábanas haciéndote olvidar con mis caricias el amargo sabor de este lluvioso día. No puedo, y no sabes cuánto me fastidia, porque ni de lejos puedes ver las ganas que tengo de zamparte, bocadito a bocadito, entero, hasta que no quede ni una sola pena en tu cuerpo, hasta que las haya eliminado todas. Te cambio mi deseo por un regalo, sé que es muy simple, pero es mi promesa y está firmado. Tres cositas:
- Mañana, martes 15 de febrero soy toda tuya desde las seis y diez (sí, tú decides.)
- El viernes vamos a regalarnos un poquito de tiempo juntos, que ya va siendo hora.
- Te regalo 24 horas de mimos, sabes que los tendrás siempre, pero es un comodín. Repártelas como quieras, de hora en hora, todo un día, cinco minutos, como más te apetezca y, si ves que no te llegan, siempre puedes pedir una reclamación.
Je t'aime (L)

martes, febrero 1

.Nothing else matters

Fue visto o no visto. Un flash, un resplandor en medio de la oscuridad, una certeza. No sabía que un día pudieras despertar por la mañana pensando que no puedes más y convertirte en la persona más feliz del universo algo después de las ocho y media de la tarde. Pensé que sería un día más, caminaba sumida en mis penas y tú me rescataste, me cogiste de la mano y no me has vuelto a soltar. A veces tengo miedo, tengo miedo a que no entiendas cuánto me importas, miedo a que no te des cuenta de que daría la vida por ti una y otra vez, como en un bucle. Porque tú me salvaste. Contigo he aprendido a ver otra realidad. No hay palabras, es muy simple. Un suspiro, dos palabras, ocho letras, un vuelco completo, 360º: "Te quiero".