martes, noviembre 20

You are wonderful tonight.

Te quiero. En serio, te quiero. Y nunca te escribo, ya lo sé, pero es por una buena razón, no hay nada que pueda decirte que no te haya dicho ya. Es que tú sabes mejor que nadie hasta que punto tú eres capaz de hacerme respirar, hasta que punto... Y sólo hay una cosa que me quede, que ya te he dicho, es cierto, pero no tanto como todo lo demás, ¿quieres saber qué? Está bien, te lo diré, GRACIAS. Por acariciarme en la oscuridad mientras me quedo dormida y por no soltarme por la noche. Gracias por hacerme sonreír en los momentos más difíciles y por nunca rendirte conmigo. Gracias por haberme hechizado, gracias por haberme hecho llegar lejos, a ese lugar que es sólo nuestro, a ese lugar que sólo tú conocías y que ahora conocemos tú y yo. Gracias por haberme enseñado quién soy, por no haberme dejado tirada, por no haber dejado que me rinda, que me pierda. Gracias. Gracias por darme un beso cada día, por darme el primer y el último beso del día. Gracias por tenernos, por tenernos el uno al otro y gracias por no haber dejado que olvide quienes somos y de dónde venirnos, por no haber permitido que olvide que somos dos y que no basta con decir que algo existe para que esté bien, hay que cuidarlo, mimarlo, hay que hacerle el amor y no la guerra (vale, estoy en ello). En fin, moito ruido e poucas noces, ya sabes tú que no sé escribir cartas de amor, que me pierdo, me hago un lío y me vuelvo loca. Que toda esa tontería de perderme en tu mar y comerme mis sueños es demasiado cursi hasta para mí porque el amor es algo real, es algo que existe, Ale, y tú y yo lo sabemos, no podemos fingir que es un mar en el que nos balanceamos y que no hay problemas, pero sí podemos decir que somos felices, porque lo somos, ¿no? Ya van dos años y, en serio, me parece tanto tiempo que tengo ganas de gritar y salir corriendo, pero no lo voy a hacer, voy a ser valiente y a aguantar, dejaré que ocurra, que siga su curso con sus cosas buenas y sus cosas malas, como hasta ahora, siempre y cuando seamos felices. Y me alegro, me alegro, de hecho es lo que quiero hacer, lo quiero tanto y tan fuerte... ¿y saber por qué? Porque te quiero.